Isabel Aida, mi maestra en el arte de hacer radio
Isabel Aida Rodríguez, Premio Nacional de la Radio Cubana por la obra de toda la vida, ha fallecido en La Habana, a los 81 años. Escritora, guionista, asesora y directora de programas, Isabel Aida fue maestra de varias generaciones de radialistas cubanos. Me cuento entre sus discípulos en el arte de hacer radio.
Siempre aprecié sus valores humanos, su amor por el prójimo, y su maestría. La última vez que topé con ella fue a inicios de este año, en la sede de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba, UNEAC, su otra casa, donde en los últimos 20 años fue guía e inspiración de muchos realizadores cubanos.
Recuerdo su alegría cuando gané en 1989 aquel primer premio Caracol con el radiodocumental 'Confesiones de una espiritista', que devino en el documental de cine 'Hasta la reina Isabel baila el danzón' que realicé después junto al experimentado director Luis Felipe Bernaza.
Ahora, cuando todos sus amigos le han dado en La Habana el último adiós, me sumo desde aquí con la reproducción de una entrevista publicada en la página web de la radio cubana.
Isabel Aida Rodríguez, emblema de nuestra radiodifusión
Isabel Aida Rodríguez Fernández fue una figura emblemática de la Radio Nacional, desde niña la asaltan las inquietudes artísticas. Escribía poemas, décimas, sonetos y poesía libre. La inspiraba José Martí y también las desigualdades sociales que veía. En la Escuela Profesional de Comercio, donde trabaja como contadora, le vaticina el profesor Joaquín Añorga que sería escritora, por una narración que había solicitado en el aula. Me dice que esta apreciación de un profesor a quién respeta mucho la inspira a continuar.
El primer responsable de lo que ha sido su vida como creadora en la radio es José Manuel Carballido Rey. ¿Por qué?
“Él conocía algunos de mis primeros cuentos y sabía que poseía una buena biblioteca de este género narrativo, por lo que en 1961, siendo él director de CMQ Radio me nombró Productora de Mesa, lo que hoy con algunas variantes se conoce como Asesora. Fui así, la primer Productora de Mesa en una emisora de Radio y en el Socialismo pues este cargo sólo existía en dos Publicitarias: la de Crusellas y la de Sabatés. Por eso digo que él me introdujo en este mundo del arte, y aquí sigo. Luego, otras muchas personas influyeron en mi desarrollo".
Llega a la radio a través de CMQ. Allí comienza a trabajar como auxiliar de oficina el 16 de septiembre de 1948, apenas graduada de Contable. Realiza después diversos trabajos de más responsabilidad en el Departamento de Programas de CMQ Radio y Televisión.
Sobre sus actividades en esta emisora después del 12 de septiembre de 1960, trato de indagar.
"Después de la intervención del Circuito CMQ S.A., en 1960 (cuyas actas me tocó mecanografiar, dictadas por Gregorio Ortega, nombrado director de la Empresa CMQ.) Fui su Jefa de despacho y posteriormente, Administradora del Departamento de Programas de Radio y Televisión".
Me comenta que en 1961 la ubican como Productora de Mesa. Cuente la experiencia.
"Ya en el trabajo como Productora de Mesa, como ya dije, me inicié en el espacio Historias Apasionantes. Proveía a la escritora María Elena Llana de seis cuentos semanales para su adaptación. Después me asignaron, además, una Novela original cubana, la Novela de las tres de adaptaciones de la literatura universal, el espacio humorístico De Fiesta a las nueve (popularmente conocido por Tota y Pepe que escribía Alberto Luberta), y un programa diario de poemas".
Pero usted también incursiona como escritora. ¿Cuándo lo hace?
"Alternando con esta labor de producción de mesa, comencé a adaptar cuentos eventualmente, en 1964. Mas tarde, escribí varias series de programas de heroínas vietnamitas para el espacio Ciudadanos del mundo".
En 1967 la trasladan a Radio Rebelde <> y para allí fue trasladado el espacio El cuento de lunes a viernes, que continúa asesorando, dirigido por Juan Carlos Romero. Simultanéa con lo anterior la responsabilidad de Jefa del Bloque de la Universidad de La Habana, cuyos programas Arte y literatura, bisemanal, y la Universidad y el pueblo, semanal, se realizaban con los más destacados profesores de la misma.
De cuando se inicia como directora de programas, me comenta:
"En Radio Rebelde también asesoraba el espacio Se abre un libro, creado por mí como apoyo al plan de estudios de literatura de tercer año de preuniversitario. Es realmente en este complejo programa donde me inicio como directora, en fragmentos de obras literarias, desde La Ilíada, Fausto, Tartufo, La Madre y otras hasta Hemingway, Kafka y Maiakovski. Fue una escuela para mí y los dos espacios de la Universidad me sirvieron como estudios superiores por la profundidad de pensamiento de los participantes"
¿Cuándo regresa a Radio Liberación, antigua CMQ, cómo lo hace?
"En 1968, a mi regreso a Radio Liberación, escribí mi primera versión radial de una novela, Sangre y Arena de Blasco Ibáñez. En esta emisora continué dirigiendo novelas, cuentos, teatros, espacios históricos, revistas culturales y luego en la Empresa Artística programas humorísticos en estudio y control remoto y en Radioarte programas para niños, teatros, cuentos y programas especiales"
"No quisiera olvidar que a finales de la década de los 60 escribí para Radio Progreso la novela histórica original de 206 capítulos, El asalto al cielo, sobre los sucesos de la Comuna de París. Esta novela fue dirigida por Oscar Luís López".
¿Y los inicios de su formación como directora?
"Bueno, yo pienso que comenzó viendo a magníficos directores como Sergio Doré, Miguel Llao, Sol Pinelli y otros en la antigua CMQ. Luego, mi trabajo como Productora de Mesa con Julito Lot, Oscar Luís López, Carlos Paulín, Sol y muchos más. Cada uno de ellos y aún aquellos que yo escuchaba sus programas como es el caso de un Abelardo Rodríguez o Gilberto Enríquez, contribuyeron a mi formación y, claro está el sin par magisterio de Odilia Romero. También me ayudaron los conocimientos y experiencia que me transmitió Iris Dávila. Trabajar con escritores de la talla de Maria Elena Llana, Héctor Quintero, José Antonio Zarraluqui, Alberto Luberta, Xiomara Blanco, Silvia Pérez Llera y Abelardo Vidal, por sólo nombrar unos pocos, contribuyeron a convertirme en esta supuesta especialista de radio que hoy soy"
¿Recuerda la primera obra que usted dirige?. ¿Quiénes trabajaron?
"Lo que considero la primera obra son los seis fragmentos de La Ilíada. ¡Menudo trabajo que me dieron!. Yo hice la adaptación y el musicalizador fue Luis Felipe Martínez. Cuando cambiamos impresiones sobre la musicalización de la obra, se me ocurrió irnos a CMBF a ver a José Machado quien, entre dos sonrisas, nos facilitó los discos de Carmina y Cátula y Carmina Burano de Karl Orff. Este programa contribuyó mucho a nuestro desarrollo".
"Los actores que interpretaron a Agamenón, Penélope, Patroclo, Héctor, Aquiles, fueron todos de gran calidad: Juan Carlos Romero, Alicia Fernán, Severino Puente, José Corrales, Lidia Montes, Miguel Navarro, entre otros. En este espacio los repartos variaban con las obras. Trabajaron también Carlos Paulín, Ángel Toraño, Gaspar de Santelices".
Siempre existen las personas que ejercen mayor influencia en nuestra formación como artistas. ¿Quiénes son los modelos o paradigmas de Isabel Aída Rodríguez?
"Debo comenzar por quienes ejercieron influencia en mi labor de asesora y escritora: Iris Dávila y Odilia Romero. Luego, la creatividad de Julio Lot, los montajes de espectáculos de aventuras y de programas estelares nocturnos de Oscar Luis López, la disciplina ejemplar de Sol Pinelli, la sin par imaginación de Justo Rodríguez Santos, la frescura de Gaspar Arias, la exigencia inigualable de ese gran director que fue Erdwin Fernández, el descubrimiento de otras posibilidades con Julio Batista, en fin, la lista sería interminable".
"¿Paradigmas? En algún aspecto, Odilia, en otros Julito y la sabiduría de Iris Dávila, sería lo más cercano a mi paradigma".
Sobre los elementos que considera vitales en un buen director, Isabel nos dice desde su vasta experiencia:
"Tener cultura general, alta sensibilidad creativa, comunicación fácil con el equipo de realización, profundidad en el análisis de la obra, los personajes, la época y, sobre todo, saber escuchar las inquietudes o puntos de vista de los integrantes, porque es la base de un trabajo de creación colectiva".
Para un director o directora existen nombres en la actuación que más se recuerdan
"Me parecería una gran injusticia ignorar tantos a quienes debo en gran medida mi desarrollo. Trataré de resumir en algunos lo que ellos significaron: la musicalidad de la voz de Gina Cabrera, la gran calidad de Eduardo Egea, Elvira Cervera, Ofelia Núñez, y Frank González. Reitero que la omisión de más de veinte nombres me deja un mal sabor en la boca".
Sus programas de radio reciben muchos lauros. Por supuesto no los recuerda todos.
"Casi todos, pero me voy a referir a los eventos de mayor competencia: Quince Premios Caracol. Tres Grandes Premios y 45 Premios en los Festivales Nacionales de la Radio Cubana. Cuatro Premios Mariposa. Caracol de Honor de la UNEAC en el año 2003 durante la premiación del Concurso Caracol. También recibí un premio internacional, evento patrocinado por la Asociación Mundial de Radios Comunitarias (AMARC)".
Una última pregunta: ¿Qué representa para usted el Premio Nacional de la Radio?
"Sin duda, es el reconocimiento más alto que he recibido por la obra realizada durante tantos años. Pienso que en mi se ha premiado de alguna manera a quienes lamentablemente ya no se les puede entregar este premio porque han desaparecido físicamente, aunque nos han dejado un gran legado"
Nota:
Isabel Aida Rodríguez Fernández, nació en Ciudad de La Habana, el 26 de septiembre de 1928. Su prolifera carrera la han hecho acreedora de grandes premios en disímiles eventos sobre la Radio.
Participó con gran entusiasmo recientemente en la Vigésimo Novena edición del Festival Nacional de la Radio Cubana, como invitada de honor, en donde recibió el reconocimiento de cientos de radialistas participantes en el principal encuentro de creadores de la radio en Cuba.
Fuente: Portal de la Radio cubana/ Escrito por: Josefa Bracero Torres.
Siempre aprecié sus valores humanos, su amor por el prójimo, y su maestría. La última vez que topé con ella fue a inicios de este año, en la sede de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba, UNEAC, su otra casa, donde en los últimos 20 años fue guía e inspiración de muchos realizadores cubanos.
Recuerdo su alegría cuando gané en 1989 aquel primer premio Caracol con el radiodocumental 'Confesiones de una espiritista', que devino en el documental de cine 'Hasta la reina Isabel baila el danzón' que realicé después junto al experimentado director Luis Felipe Bernaza.
Ahora, cuando todos sus amigos le han dado en La Habana el último adiós, me sumo desde aquí con la reproducción de una entrevista publicada en la página web de la radio cubana.
Isabel Aida cuando recibió el homenaje de la UNEAC Foto: La Jiribilla |
Isabel Aida Rodríguez Fernández fue una figura emblemática de la Radio Nacional, desde niña la asaltan las inquietudes artísticas. Escribía poemas, décimas, sonetos y poesía libre. La inspiraba José Martí y también las desigualdades sociales que veía. En la Escuela Profesional de Comercio, donde trabaja como contadora, le vaticina el profesor Joaquín Añorga que sería escritora, por una narración que había solicitado en el aula. Me dice que esta apreciación de un profesor a quién respeta mucho la inspira a continuar.
El primer responsable de lo que ha sido su vida como creadora en la radio es José Manuel Carballido Rey. ¿Por qué?
“Él conocía algunos de mis primeros cuentos y sabía que poseía una buena biblioteca de este género narrativo, por lo que en 1961, siendo él director de CMQ Radio me nombró Productora de Mesa, lo que hoy con algunas variantes se conoce como Asesora. Fui así, la primer Productora de Mesa en una emisora de Radio y en el Socialismo pues este cargo sólo existía en dos Publicitarias: la de Crusellas y la de Sabatés. Por eso digo que él me introdujo en este mundo del arte, y aquí sigo. Luego, otras muchas personas influyeron en mi desarrollo".
Llega a la radio a través de CMQ. Allí comienza a trabajar como auxiliar de oficina el 16 de septiembre de 1948, apenas graduada de Contable. Realiza después diversos trabajos de más responsabilidad en el Departamento de Programas de CMQ Radio y Televisión.
Sobre sus actividades en esta emisora después del 12 de septiembre de 1960, trato de indagar.
"Después de la intervención del Circuito CMQ S.A., en 1960 (cuyas actas me tocó mecanografiar, dictadas por Gregorio Ortega, nombrado director de la Empresa CMQ.) Fui su Jefa de despacho y posteriormente, Administradora del Departamento de Programas de Radio y Televisión".
Me comenta que en 1961 la ubican como Productora de Mesa. Cuente la experiencia.
"Ya en el trabajo como Productora de Mesa, como ya dije, me inicié en el espacio Historias Apasionantes. Proveía a la escritora María Elena Llana de seis cuentos semanales para su adaptación. Después me asignaron, además, una Novela original cubana, la Novela de las tres de adaptaciones de la literatura universal, el espacio humorístico De Fiesta a las nueve (popularmente conocido por Tota y Pepe que escribía Alberto Luberta), y un programa diario de poemas".
Pero usted también incursiona como escritora. ¿Cuándo lo hace?
"Alternando con esta labor de producción de mesa, comencé a adaptar cuentos eventualmente, en 1964. Mas tarde, escribí varias series de programas de heroínas vietnamitas para el espacio Ciudadanos del mundo".
En 1967 la trasladan a Radio Rebelde <> y para allí fue trasladado el espacio El cuento de lunes a viernes, que continúa asesorando, dirigido por Juan Carlos Romero. Simultanéa con lo anterior la responsabilidad de Jefa del Bloque de la Universidad de La Habana, cuyos programas Arte y literatura, bisemanal, y la Universidad y el pueblo, semanal, se realizaban con los más destacados profesores de la misma.
De cuando se inicia como directora de programas, me comenta:
"En Radio Rebelde también asesoraba el espacio Se abre un libro, creado por mí como apoyo al plan de estudios de literatura de tercer año de preuniversitario. Es realmente en este complejo programa donde me inicio como directora, en fragmentos de obras literarias, desde La Ilíada, Fausto, Tartufo, La Madre y otras hasta Hemingway, Kafka y Maiakovski. Fue una escuela para mí y los dos espacios de la Universidad me sirvieron como estudios superiores por la profundidad de pensamiento de los participantes"
¿Cuándo regresa a Radio Liberación, antigua CMQ, cómo lo hace?
"En 1968, a mi regreso a Radio Liberación, escribí mi primera versión radial de una novela, Sangre y Arena de Blasco Ibáñez. En esta emisora continué dirigiendo novelas, cuentos, teatros, espacios históricos, revistas culturales y luego en la Empresa Artística programas humorísticos en estudio y control remoto y en Radioarte programas para niños, teatros, cuentos y programas especiales"
"No quisiera olvidar que a finales de la década de los 60 escribí para Radio Progreso la novela histórica original de 206 capítulos, El asalto al cielo, sobre los sucesos de la Comuna de París. Esta novela fue dirigida por Oscar Luís López".
¿Y los inicios de su formación como directora?
"Bueno, yo pienso que comenzó viendo a magníficos directores como Sergio Doré, Miguel Llao, Sol Pinelli y otros en la antigua CMQ. Luego, mi trabajo como Productora de Mesa con Julito Lot, Oscar Luís López, Carlos Paulín, Sol y muchos más. Cada uno de ellos y aún aquellos que yo escuchaba sus programas como es el caso de un Abelardo Rodríguez o Gilberto Enríquez, contribuyeron a mi formación y, claro está el sin par magisterio de Odilia Romero. También me ayudaron los conocimientos y experiencia que me transmitió Iris Dávila. Trabajar con escritores de la talla de Maria Elena Llana, Héctor Quintero, José Antonio Zarraluqui, Alberto Luberta, Xiomara Blanco, Silvia Pérez Llera y Abelardo Vidal, por sólo nombrar unos pocos, contribuyeron a convertirme en esta supuesta especialista de radio que hoy soy"
¿Recuerda la primera obra que usted dirige?. ¿Quiénes trabajaron?
"Lo que considero la primera obra son los seis fragmentos de La Ilíada. ¡Menudo trabajo que me dieron!. Yo hice la adaptación y el musicalizador fue Luis Felipe Martínez. Cuando cambiamos impresiones sobre la musicalización de la obra, se me ocurrió irnos a CMBF a ver a José Machado quien, entre dos sonrisas, nos facilitó los discos de Carmina y Cátula y Carmina Burano de Karl Orff. Este programa contribuyó mucho a nuestro desarrollo".
"Los actores que interpretaron a Agamenón, Penélope, Patroclo, Héctor, Aquiles, fueron todos de gran calidad: Juan Carlos Romero, Alicia Fernán, Severino Puente, José Corrales, Lidia Montes, Miguel Navarro, entre otros. En este espacio los repartos variaban con las obras. Trabajaron también Carlos Paulín, Ángel Toraño, Gaspar de Santelices".
Siempre existen las personas que ejercen mayor influencia en nuestra formación como artistas. ¿Quiénes son los modelos o paradigmas de Isabel Aída Rodríguez?
"Debo comenzar por quienes ejercieron influencia en mi labor de asesora y escritora: Iris Dávila y Odilia Romero. Luego, la creatividad de Julio Lot, los montajes de espectáculos de aventuras y de programas estelares nocturnos de Oscar Luis López, la disciplina ejemplar de Sol Pinelli, la sin par imaginación de Justo Rodríguez Santos, la frescura de Gaspar Arias, la exigencia inigualable de ese gran director que fue Erdwin Fernández, el descubrimiento de otras posibilidades con Julio Batista, en fin, la lista sería interminable".
"¿Paradigmas? En algún aspecto, Odilia, en otros Julito y la sabiduría de Iris Dávila, sería lo más cercano a mi paradigma".
Sobre los elementos que considera vitales en un buen director, Isabel nos dice desde su vasta experiencia:
"Tener cultura general, alta sensibilidad creativa, comunicación fácil con el equipo de realización, profundidad en el análisis de la obra, los personajes, la época y, sobre todo, saber escuchar las inquietudes o puntos de vista de los integrantes, porque es la base de un trabajo de creación colectiva".
Para un director o directora existen nombres en la actuación que más se recuerdan
"Me parecería una gran injusticia ignorar tantos a quienes debo en gran medida mi desarrollo. Trataré de resumir en algunos lo que ellos significaron: la musicalidad de la voz de Gina Cabrera, la gran calidad de Eduardo Egea, Elvira Cervera, Ofelia Núñez, y Frank González. Reitero que la omisión de más de veinte nombres me deja un mal sabor en la boca".
Sus programas de radio reciben muchos lauros. Por supuesto no los recuerda todos.
"Casi todos, pero me voy a referir a los eventos de mayor competencia: Quince Premios Caracol. Tres Grandes Premios y 45 Premios en los Festivales Nacionales de la Radio Cubana. Cuatro Premios Mariposa. Caracol de Honor de la UNEAC en el año 2003 durante la premiación del Concurso Caracol. También recibí un premio internacional, evento patrocinado por la Asociación Mundial de Radios Comunitarias (AMARC)".
Una última pregunta: ¿Qué representa para usted el Premio Nacional de la Radio?
"Sin duda, es el reconocimiento más alto que he recibido por la obra realizada durante tantos años. Pienso que en mi se ha premiado de alguna manera a quienes lamentablemente ya no se les puede entregar este premio porque han desaparecido físicamente, aunque nos han dejado un gran legado"
Nota:
Isabel Aida Rodríguez Fernández, nació en Ciudad de La Habana, el 26 de septiembre de 1928. Su prolifera carrera la han hecho acreedora de grandes premios en disímiles eventos sobre la Radio.
Participó con gran entusiasmo recientemente en la Vigésimo Novena edición del Festival Nacional de la Radio Cubana, como invitada de honor, en donde recibió el reconocimiento de cientos de radialistas participantes en el principal encuentro de creadores de la radio en Cuba.
Fuente: Portal de la Radio cubana/ Escrito por: Josefa Bracero Torres.
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